Sweet Lulaby

Hace casi 6 años de lo que a continuación relatare y sin embargo sigue en mi mente como si lo estuviera viendo claramente, incluso recuerdo el timbre dulce de su voz, recuerdo hasta su perfume con olor a mandarina y el modo en que el sol se reflejaba en su cabello rubio…

- no puedo cruzar, me da miedo
-Te quiero Lourdes, yo te cuido…
-No me digas así, suena como si estuvieras enojado conmigo; ¡Y no te rías es en serio ese nombre no me gusta!!!
-Ok, Te quiero mucho Lulaby.
-Yo también te quiero Jorge, es mas, TE AMO.
-no puedes amarme niña, no todavía.
-¿Tu no me amas?
-No lo se, yo creo.
-ay Jorge eres un desastre
- ¿de verdad me amas?
-si
-entonces yo también Te Amo Lulú

jamás pensé que ese primer “Te Amo” (¿por que si cuenta no?) seria la causa para que esa niña de cabellos rubios y ojos azules terminara conmigo el mismo día en que yo cumpliera los 15 años…

-Hoy es tu cumple, y te tengo el regalo perfecto
-JAJA ¿y cual es?
-voy a hacer el amor contigo
- no espérate, ¿otra vez con eso de acostarnos?
-no es acostarnos, es hacer el amor y dime ¿que tiene de malo, nos amamos no?
-emm si, creo…
-entonces déjame demostrártelo.
-aun estoy muy chico, tienes 14 años, ¿no es demasiado pronto?, imagina si te embarazas, ¿como mantengo a mi hijo?
-entonces no me amas
-sinceramente no estoy seguro Lula,
-tu eres mi vida Jorge, y no me siento correspondida.

La discusión siguió durante 10 minutos, que era el tiempo que hacíamos de mi casa a la suya (donde me esperaba una fiesta “sorpresa” que ella había organizado con toda su familia) a mitad del camino (es decir transcurridos lo 10 minutos) le dicte sentencia:

-creo que esto no esta funcionando Libélula, lo mejor es volver a ser amigos y nada mas.
-pero ya vamos a cumplir 2 años!
-si bonita pero esto no jala, buscamos cosas diferentes, somos maduros y créeme cuando yo sepa que es el momento se me va a salir solito, sin que tu me preguntes si te amo o si quiero hacer el amor contigo.
-no Jorge es que si tu me dejas yo me muero, tu eres mi vida, te necesito, no voy a soportar verte todos los días y no estar a tu lado, sentarme junto a ti y no besarte no tomarte la mano, no Jorge tu no puedes dejarme.
-no te estoy dejando, solo quiero que seamos solo amigos un ratito, y después volvemos, solo necesito valorarte mas, y que tu me entiendas un poco. Pero no te estoy dejando.
Los siguientes 10 minutos (o mejor dicho 8 minutos y 30 segundos por que casi llegando a su casa hicimos como que nada pasaba) fueron llorar y llorar de ella diciéndome lo mucho que yo significaba y rogándome para que no la dejara, eso si sin moverse acerca de su postura acerca del sexo. O lo teníamos o lo teníamos y yo ni siquiera estaba seguro si la amaba.
-Si tu me dejas te juro que mañana no amanezco viva, es una promesa Emmanuel ¡me mato! –me dijo gritándome en la cara con su rostro desecho de tristeza y su hermoso maquillaje escurriéndole por las mejillas -

Al llegar a su casa todo paso con naturalidad, comida, regalos, pastel, amigos, ella se veía radiante entre las bromas y los juegos de nuestros amigos, estábamos sentados uno junto a otro, no nos tocábamos siquiera pero nadie supo nunca que ya no éramos novios para entonces, su familia seguía bromeando y platicando animadamente, algunos maestros de la secundaria se pararon por ahí agradeciendo la invitación y la señora Arriaga (la mama de la libélula) sonreía de un lado al otro notando no solo m cara extasiada por los detalles sino la de su propia hija disfrutando tan animada de la fiesta.
Pensé que Lula por fin asumía el hecho de que podíamos ser amigos y tan felices como siempre, unas horas después supe que lo único que hacia era vivir su último día al máximo…

-Bueno?
-Jorge? Habla Jareck, tenemos un problema…

Héctor Jareck Tolentino es hijo de el subdirector de la secundaria, un maestro muy querido tanto por Lulú como por mi, Jareck, además de ser un magnifico traficante de influencias era mi mejor amigo y compañero de aventuras.

-dime HJ te escucho,
-es Lulú hermano,

Un escalofrió nació en mi espina dorsal recorriéndola de abajo a arriba y propagándose por mis brazos, mis piernas se doblaron y caí sentado en el sillón con una gota de sudor frio resbalando por mi sien cuando Jareck suspiro profundo y me dijo

-Esta grave hermano, tuvo un accidente.
-Un accidente? Pero como? ¡Donde esta, quiero verla!

Detrás de Jareck una voz profunda le decía que me dijera que pasaban por mí a mi casa en 15 min, que estuviera en la puerta, esa fue la primera vez que escuche a Carlos pero hablare de eso otro día.

-ok aquí nos vemos bro.
Y colgamos

Dijeron 15, cuando los vi eran las 7:05 así q estuvieron ahí en 10 a bordo de una trail-blazer negra, Jareck como copiloto. Lulú había sufrido un choque, cuando llegamos al lugar ella ya no estaba ahí, la habían trasladado a la cruz verde, todo lo que vi cuando llegue fue el auto de la señora Arriaga convertido en una mole de fierros retorcidos con el cofre sumido por la mitad al incrustarse de frente a 120 km/h en un frondoso árbol del anillo periférico casi en su cruce con la carretera a tesistan. A grandes rasgos y según los peritos, Lulú no llevaba el cinturón, acelero por la lateral de periférico para después girar en redondo hasta incrustar el auto en el tronco, cuya inercia la saco volando por el parabrisas golpeando su cabeza-cara-cuello-hombro en el tronco del árbol, ladeando un poco a este ultimo.

(Aquí me gustaría abrir un paréntesis solo para mencionar que la prepa a la que acababa de entrar estaba a escasos 15 minutos del lugar del accidente, es decir, Lulú escogió incluso donde estrellarse)

Llegamos a la cruz roja, su madre estaba tan desecha en lagrimas que ni siquiera se fijo en nuestra presencia, la niñita de 14 años ante mi estaba irreconocible, con el pelo despeinado, la parte derecha de su rostro infantil mostraba los arañones de la corteza del árbol su hombro estaba vendado, tenia la mirada débil, la boca parecía una débil línea, debajo de su naricita coqueta goteaba un liquido espeso y en ese momento estaba tan hinchada que tenia un color rojizo, su cuello se sostenía con un collarín, y mientras ella recibía aire puro a presión por un tanque de oxigeno el ambiente se inundaba con un aroma que me la recordaría a ella para siempre, el olor A SANGRE FRESCA…

-hola niña bonita, que paso?
-soy una cobarde, pero cumplo mis promesas, ya me voy, ahora yo te cuido a ti...

Vi como su vida se apagaba lentamente esa noche, a las 21:21, 3 horas después del accidente mi “sweet Lulaby” iba de camino al paraíso…

Sus hermanos llegaron cuando ella ya había muerto, febriles voltearon hacia mi cuando les mostraron un pequeño sobre que salió de su bolsita de hello kitty era una carta póstuma, dirigida tanto a mi como a la familia de aquella pequeña…

-señora lamento decirle que esto cierra la investigación, su hija se suicido.
-fue por culpa de aquel cabron!

Dijo el menor que en ese entonces debió tener unos 16 años enfurecido se lanzo hacia mi mientras su madre sufría un desmayo en los brazos del mayor. Comenzó a insultarme a gritos y una enfermera con acopio de tranquilidad nos pidió amablemente que “arregláramos nuestras diferencias afuera” acto seguido salimos de la cruz verde y comenzamos la pelea, de la que iba saliendo bien librado gracias al tae kwon do hasta que llego Mario (el hermano mayor, de en ese entonces 25 años) y me puso una arrastrada mientras desde el otro lado de la calle Carlos y Jareck veían el espectáculo y este ultimo fumaba un cigarro.
En el momento en que estaba comenzando a sangrar, se escucho la voz de Carlos, que hasta entonces no había hablado ni sido presentado conmigo, quien desenfundando una daga colgada de su cinturón y cubierto por su gabardina comenzó a acercarse a mis agresores.

-Si el vive, ustedes viven, pero si el Si el sangra, ustedes sangran, y si muere ustedes mueren abiertos desde el cuello al ombligo lentamente mientras miran como saco sus riñones y los obligo a morderlos. Capicci?

Lulú murió, pero esa fue también la última noche de mi vida como la conocía…
Pero eso como ya dije, lo contare después.